Le hice notar que si estabamos hablando de valores y bien democratico sí lo estábamos haciendo aunque no nos diéramos cuenta.
Eso no es cierto. Se puede trabajar con un concepto sin establecer una definición. Es, verdad que si uno lo usa es porque hay cierto entendimiento o perspectiva sobre ese concepto, pero eso no es una definición. Una definición es clara y exacta, requiriendo entonces de un proceso de confección deliberado y final. Trabajar un concepto sin una definición no es tan raro como parecería. En biología, por ejemplo, se ha propuesto que no es necesario definir el concepto de vida para su desarrollo científico. El concepto entonces queda abierto, ambiguo, sin terminar, pero no por eso inútil ni incomprensible ni imparcial.
Cabe recordar el clásico argumento de Wittgestein sobre el significado del concepto juego.
Borra las imágenes viejas y era, qué vai a andar acumulando weas tan irrelevantes.